samedi, septembre 10, 2011

Cosas que pasaron dos 10 de septiembre en uno solo

 
Dos veces ! no te confundas....


(por ahora solo un borrador escrito el 10 de sept 2011)



Un hombre joven saca su cuerpo del bar
deja ir puerto abajo su ebriedad
hipnotizado por el mar y los barcos
oscurecido por el metro y el fin del verano.
Se echa a un lado de una puerta vencida
y pide el periódico de la tarde mientras bebe su café aguado
tropieza con unos perros que roncan en la escalera fría
y busca las llaves de su pieza de estudiante
no recuerda que las olvidó sobre la mesita de su amiga
que le sirvió para dejar además los cigarros que fumaron después del entre acto
en una escena de la 5 avenue.
El hombre joven piensa en ella y sabe que la verá mañana entre los pisos 36 y 48 donde ella limpia las oficinas de la torre este
son gemelas las torres y gemelos son los dias como un par de 1
como milicos desfilando por el calendario del hombre.
Camina otra vez y sus manos en los bolsillos registran por si acaso las llaves aparecen ahí,
pero no hay caso, así que dice que dormirá en la universidad donde sigue una carrera de poco pelo y mucha fiesta
se dice que el guardia lo dejará tranquilo
porque se reconocen originarios del mismo pueblo precordillerano
originario de la toma de terreno donde él y sus compañeros han ido a alfabetizar,
tocar la guitarra y tocar la carne de algunas jovencitas simpáticas y vividoras.
Pasa al otro lado de la reja por donde entran alcohol al campus y efectivamente se cruzan desde lo lejos, el vigilante y el estudiante sin papeles,
el clandestino que llegó a N.Y.
el estudiante que salio de un clandestino en Valparaiso
como el vigilante lo hizo años atrás desde El Salvador.
No es necesario hablar de la historia personal, ni saludarse con gestos
en el olor se reconocen las murallas saltadas, el pasaporte falsificado, el hambre apenas acallado, la sed de dinero para todas las urgencias que pronto lo matarían de tanto esperar.
Baja los ojos y busca un rincón oscuro para dormir sobre el pasto.
 Espera verla mañana en el centro,
cerca del restaurante donde ella trabaja
en esas oficinas, en las alturas, en el extremo sur-norte del mundo, en el amor si el deseo les viene.
Hacer el amor durante el medio día en su pensión
arriba de un cerro, en la cima del once de septiembre
desde donde se puede observar el Pacífico en su calma falsa,
como una cama sobre la que unos aviones atacarán sus cuerpos
a chuparles la sangre
y desaparecerlos entre las sábanas como sombras secas y blancas
¡Puta los mosquitos y pulgas del puerto!

1 commentaire:

jordi lobo a dit…

Pues para ser un borrador, sr. drfloyd, es estupendo.