Grandville |
Días de parques
el columpio emboscado por la velocidad
de piernas y el peso de culos
la liviana risa de los juegos
el columpio va
el columpio no viene
no sigue dócil
el ilusorio
asomar de los calzones de niñas y sus pezones lanzados al atacante que llora
avergonzado para después levantar una espada de plástico y entierrar con ella
las heridas como hostigamiento macedónico.
Días en que gira el aceitado óptico de los hombres y el
columpio se debate en su perfil intocable
detenerlo es el horror, el moretón encarnado.
Muchos suicidios han consumado este aire de recreo
se
mantiene estáticoun ir y venir encadenado.
1 commentaire:
Que buen poema, me encantó !
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