vendredi, avril 06, 2012

(17)

tempestad, Nicolas Folch 2011

Los cables del tendido eléctrico
cuelgan.
Son la enorme raíz quieta que atrapó a la mosca del ojo
detrás de los vidrios
sobrevuela el eco de postes ampolletas calles
para secar la ansiedad, el temor, las masacres,
la envidia que nos viste de público secreto.
La corriente no pasa ventana afuera – cielo adentro.
La raíz expande su voz que anuncia
“He detenido todo”
sus cables clavan el cielo a la tierra
y los queltehues anuncian el cortocircuito
con el consecuente porrazo de los que vayan
sobre las escalas mecánicas.
Los cables se enraízan en cada segundo que pasa
y los asesina con el veneno de una certeza ardiente:
“No hay nada que esperar”
Allá afuera
los cables muestran la belleza de la araña inmóvil
con su verdad de lo que es y lo que será.
Ella es el UBIS que pide comprobar las siguientes coordenadas:

34°54'21.06 S y 56°11'29.04 O
49° 46′ 18.88″ N y 4° 42′ 58.04″ E
33º 1´ S y 71º 38´ O

Los lugares importan. Donde huiste sin pagar.
Donde caíste en el patio de tu calma ficticia.
Donde las putas saben cómo te llamas.
Ella es el UBIS que chupa al tiempo
y le quiebra la médula numerada,
deja sus vértebras tiradas
en este campo donde el pasto selva la sombra de los cables
y dialogan gotas amanecidas.

Aucun commentaire: