samedi, décembre 11, 2010

Salas de espera



Escribo para no desesperar.
Un nuevo trabajo, un nuevo timbre,
papeles, salas de espera,
el corazón de la máquina incrustada en nuestro ADN
me despierta a medio caer
a medio kilo extra en el borde de tu ausencia

(mi cama esta inclinada al miedo)

y me levanto y viajo
para continuar en la desaparición
como uno más de los treinta y dos tantos que me anteceden
en el beso, en la mano, en la justicia de un sándwich frío,
en la autorización numérica
con un pasaporte por nombre.

Mi angustia es tan floja
que ya no te espera.
En esta condenada sala no cabrías
un número no es lo tuyo.
Las mujeres se acercan a los exitosos.

Dentro de unos días nos encontraremos con mi nuevo timbre
y mi cama sobre un suelo de hermosas expectativas
hará que te alejes
mujer de mi lado que te busca y amante de mi lado dormido
rumbo al éxito, anyway, walking to exit, a la salida de mis salas de espera
y la máquina seguirá intacta.

4 commentaires:

Anonyme a dit…

Escribo para no desesperar
y la máquina seguirá intacta.

¡Tremendo!

drfloyd a dit…

gracias por los comentarios Javier. Con ellos me animo ante la maquina.

El tonto lirico a dit…

Nico, tu poema para ser perfecto debería tener 2 versos, tal como indica Javier, un inicio sincero ("Escribo para no desesperar") y un final consciente ("y la máquina seguirá intacta"). Aunque lo mejor seria, estimado, que no le hicieras caso a mis criticas.

drfloyd a dit…

uuuu! en realidad tal como dices, lo mejor seria no hacer caso a las criticas, pero yo estoy por lo peor (o pior), asi que masticaré y creo que algo voy entendiendo. Agradezco en tiempos de vacas flacas.