PERRO MUERTO

Estaba mirándome con los ojos fijos... Caminé dos metros más allá de lo más acá que estaba, me di vuelta y el perro seguía con su mirada fija en mí. Dos metros más allá y aún seguía con su mirada puesta en mí. Me escondí detrás de un árbol y cuando miré para ver si lo había despistado, el perro seguía mirándome. Cerré mis ojos y seguí avanzando, por si acaso eso lo confundía.. Los abrí y el perro seguía mirándome. Corrí y avance muchos metros, muchos kilómetros, salí de la ciudad, subí a un cerro y llegué a la cima... Ya no estaba físicamente, pero no pude nunca olvidar el horror con que me miraba, jamás logré sacarme esa sensación al recordar el horror de sus ojos fijos opacos, sin vida y que interrogantes trataban de que le respondiera por qué...