Y ahí
estaba yo, en una pieza iluminada
con 60 kw
de grandeza y paciencia
hasta que
llegó el dueño de este reino de espejos
para
prevenirme del temporal que se venía
“escríbete un poema pal temporal”
el desafío
que sonó a cadenas
arrojadas
al piso.
Y ahí
estaba yo con ese computador que debía apagar
para evitar
que un rayo entrara y me chamuscara
encadenado
al desafío,
el cielo
se
iluminaba bajo un velo cobalto
y solo pude
escribir
POEM
…
Aucun commentaire:
Enregistrer un commentaire