jeudi, août 03, 2006

TRABAJANDO SIN VER LA HORA

Son las 19:00 horas. Despierto de este trance que producen las teclas del computador y la fanfarria que tiene configurada mi pc cuando ingresan los e-mails y el ring ring incesante de ese teléfono que tengo a la derecha de mi escritorio. Me estiro, como si volvieran a ser las 6:30 de la mañana y bostezo y también voy al baño a orinar. Me miro en el espejo y me miro fijamente y suspiro... Mis ojeras están muy oscuras, pienso, al igual que mi orina... Creo que tendré que hacerme un tiempo para ir al médico. Vuelvo al escritorio y apago el PC.
Camino entre las nebulosas figuras de las personas que pasan a mi lado, mi campo visual está reducido y sólo pienso en llegar a casa, sin embargo, recuerdo que temprano al otro día, cercano a las 09:30 horas, tendré una reunión que no preparé. Miro el reloj son las 19:30 horas, y creo que ya es tarde, muy tarde. Pero mejor no pensar en esto, hay que descansar para mañana seguir trabajando.

2 commentaires:

Mr.Fozzil a dit…

Jo Jo Jo!!! Me acordé de un chiste de abuelitos... Si la hormiguita no cruza la carretera en verano... Es porque el hormigón está caliente... Y si la orina está dulce es porque se está derritiendo el caramelo... Je!

Mr.Fozzil a dit…

Ja ja ja... las hormigas buscan siempre lo dulce y si no llegan, no hay nada dulce.. Eso entiendo?